jueves, 15 de diciembre de 2011

Diciembre Frio


La delgada línea que hablaba de nosotros se rompió aquella noche en la que el descenso de temperaturas incendió la mecha que tanto tiempo nos costo encender. Ponle un final feliz a esta historia me susurraste al oído justo antes de que me enseñaras lo que era un beso, y un escalofrío se adueñó de mi cuerpo, un escalofrió que me hizo morirme de miedo y a la vez sentirme más vivo que nunca.

Sin guantes Diciembre es mucho más frio, con guantes tocarte no tiene sentido. Tú ebria, yo demente, frente a frente, con nada o todo por perder…


martes, 6 de diciembre de 2011

El joven vive, el viejo muere.

Una cama pequeña para una pena demasiado grande, y ella llora porque ni siquiera puede escucharlo quejarse. Ruina tras rezos, lamentos, estampillas, y gente, mucha gente. Supongo que hay matemáticas que nunca querríamos descubrir, supongo que hay verdades difíciles de asumir.

lunes, 21 de noviembre de 2011

Unomásuno


Se acostaron, pero no se levantaron, dejaron que a la noche le siguiera el día y así sucesivamente hasta que se olvidaron cuando era de noche y cuando era de día. Hicieron un mundo de unas sábanas y un colchón, y no necesitaron más mundo que ese ni más personas que una. Se miraban, y entonces se reían sin saber porque, una risa de esas a medio camino entre la estupidez y la felicidad, una risa de esas que acaba en un roce, que le sigue un abrazo, y que termina en un beso. Agotaban los segundos sumergidos en palabras, hablaban como nunca antes lo había hecho, hablaban de esas cosas que nunca se habían atrevido a contar, hasta que de vez en cuando un cálido silencio les interrumpía y la sucesión de risas, roces, abrazos y besos empezaba de nuevo.

Aquellos días se comieron la monotonía, aquellas noches reinventaron la palabra amor.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Trescientos sesenta y cinco susurros después...

Te grito un secreto a voces, te soplo un guiño de frases, te hablo sin que me escuches, escribo un punto y aparte. Desmonto tanto cuento tonto, de verdugos, de princesas, y de prisioneros adictos al café. Empiezo viajes, monto mis sueños, y cazo tesoros en conversaciones aburridas por la experiencia. Disfruto mi mundo, segundo a segundo, de esto y de aquello, lo cambio todo, y empiezo de nuevo.

Trescientos sesenta y cinco susurros después....tú tenías razón.

martes, 18 de octubre de 2011

Feliz


Otra vez te levantas y te miras al espejo, y no te gusta, otra vez, como cada día, trescientos sesenta y cinco días al año, pero sonríes, sonríes como siempre o como nunca, porque hoy quieres sonreír más, así que fuerzas tu labios, aprietas tus dientes y un día más te prometes que vas a ser feliz, un día más prometes que hoy será diferente. No es fácil, lo sé, quizás si tuvieses unos centímetros de más aquí y algunos kilos de menos allí, quizás si fueras más graciosa, o si tus ojos fuesen azules o verdes y estuvieran un poco más separados, todo sería más fácil, quizás serias popular, y las chicas populares siempre tienen novio, tú no necesitas un chico de revista, hace tiempo que no te interesan, solo necesitas alguien que te trate bien, que te haga sentir importante. Así que otro día mas sigues esperando el tren que te cambie la vida, esperando encontrar el billete ganador de lotería detrás de cualquier esquina, esperando ese no sé qué, esperando ese no sé quién.

Pero hoy dejas de esperar, hoy te montas en el primer tren que pasa sin importar el destino, hoy compras cien billetes de lotería sabiendo que uno de ellos va a ser el ganador, hoy no te importan esos centímetros de menos, o esos kilos de más, hoy te arriesgas, hoy no esperas, hoy es diferente, hoy por primera vez en tu vida quieres ser feliz.

http://www.youtube.com/watch?v=gH476CxJxfg&noredirect=1

domingo, 2 de octubre de 2011

Asta al corazón


De pronto, sin previo aviso, me percato de que estoy frente a frente con mi destino. Viene a toda velocidad, desbocado, dispuesto a arroyar con todo lo pasado en un abrir y cerrar de ojos; estoy arrinconado, no hay escapatoria, cierro los ojos y me rindo a él a puerta gayola...

Aquel día, la Plaza de los Fueros fue testigo de excepción de esta historia, una aventura inenarrable que dejaba en pequeñas migajas todas mis anteriores hazañas. Yo que había sido capaz de vencer a los Trols, de batir en duelo mortal al indestructible Goliat, incluso de hacer desaparecer la mismísima Estatua de la Libertad, jamás me había enfrentado a algo tan grande y poderoso.

Aquel ser aparentemente inofensivo, endeble e incluso irradiante de paz, traía consigo una fuerza fuera de lo común, una sensación que nunca antes había experimentado. Sus ojos me transmitían una seguridad que me hacía sentir endeble, lo cual contrarresté con alguna que otra mentira para sentirme mas seguro; su sonrisa me hacía fruncir ligeramente el ceño para protegerme de aquel brillo tan intenso, pero las gafas de sol me permitieron disfrutar de ella sin molestias. Su voz me tenía preocupado, poco a poco me iba hipnotizando y no podía hacer nada para evitarlo, suerte que la música de fondo mitigó los efectos de aquella hipnosis. También sus gestos, sus expresiones, su belleza y todo cuanto ella me iba mostrando me iba haciendo mella poco a poco.

Pronto me di cuenta de que aquella fuerza era algo superior a mi, algo a lo que no podría vencer jamás, pero a su vez algo por lo que debería luchar siempre. Una vez alguien me había hablado de algo así, de una sensación similar a la que yo estaba experimentando, creo que lo llamaba amor.

De pronto, sin previo aviso, me percato de que estoy frente a frente con mi destino. Viene a toda velocidad, desbocado, dispuesto a arroyar con todo lo pasado en un abrir y cerrar de ojos; estoy arrinconado, no hay escapatoria, cierro los ojos y me rindo a él a puerta gayola recibiendo una cornada de amor, en un ataque certero en el que atravesó el asta al corazón.



HAIKU:

Sueño en la distancia (acróstico)
Pía el gorrión y
Amanezco abrazado en
Zarzas de este amor.

CANCIÓN(ES) DEDICADA:
Naufragar, si es unidos, hará de este amor vuestra leyenda.

lunes, 26 de septiembre de 2011

Amnesia

Escribo tu nombre, lo recorto y lo pego en la pared, dos horas después se despega y se cae. Así que lo vuelvo a escribir, pero esta vez lo escribo directamente en la pared, lo escribo con uno de esos permanentes en los que el fabricante asegura que es imposible de borrar, me voy a la cama tranquilo porque por fin tengo tú nombre escrito en la pared. Me despierto, miro la pared y tú nombre ya no está, ha desaparecido. Así que vuelvo a coger el permanente para volver a pintar tu nombre en la pared, pero por alguna razón, de mi cabeza también ha desaparecido tu nombre, tu recuerdo, tú. Así que lleno mi habitación de nombres de mujer: nombres bonitos y feos, comunes y raros, nombres de vieja y nombres de poligonera, esperando encontrar sumergido entre tanto nombre, el tuyo. A la mañana siguiente tan solo quedan la mitad de los nombres, y así todos los días van desapareciendo la mitad de los que había el día anterior, hasta que solo queda un nombre en mi pared,no se si es tu nombre, no se de quién es, pero no desaparece, no se cae, ni se me olvida…

domingo, 18 de septiembre de 2011

Vértigo

Y escapar, y volver a empezar, y dejarse llevar para volver a escapar, hasta que ya no quieras correr más, hasta encontrar algo, hasta encontrar a alguien, y que sus sonrisas maten tus días grises, y que sus caricias sean peripecias que te hagan perder la razón. Escribo sin saber porque hace mucho que no se nada, digo lo que dije, y no dije nada, y aquel día dije tantas cosas…

martes, 23 de agosto de 2011

Quizás...


Algún día podríamos encontrarnos donde todo empieza, y volver a empezar lo que nunca terminó o terminar lo que un día empezamos, tú decides. Quizás ese día ya no sea tan cobarde, quizás me acerque y te invite a un café, quizás hablemos, y entonces quizás no me pueda resistir y te bese, un beso por sorpresa de esos que no te esperas, pero que quizás te guste, y entre tanto quizás, quizás me dé cuenta de que he vivido todo lo que tenía que vivir sin ti, y que él resto quiero vivirlo contigo. Sé qué quizás sea una estupidez, que probablemente saldrá mal, y estoy absolutamente convencido de que es un error, pero es un error que merece la pena cometer, porque quizás solo necesite un café contigo para ser absurdamente feliz, porque quizás tú seas la única locura con sentido para este demente sin remedio. Así que viaja, come, ríe, enamórate, disfruta, sé feliz, porque por mucho que las cosas cambien y vuelvan a cambiar, por muy lejos que te vayas o por mucho que pase el tiempo, para mí siempre estarás a tan solo un quizás de distancia.

Siempre tuyo, una casualidad.

martes, 2 de agosto de 2011

Norte


Escapé por laberintos entre arenas movedizas, me metí en el mar, aguanté la respiración y dejé que la sal curase mis heridas. Me zambullí muy fuerte, más fuerte que nunca antes lo había hecho, me hundí, y conmigo mis miedos, mis inseguridades, conmigo cada uno de los triunfos convertidos en fracaso por el paso del tiempo, conmigo su perfume, su recuerdo, conmigo ella.

Silencio, tan solo necesitaba eso, un mucho de silencio y un poco de tranquilidad, un poco de paz y unos sorbos de felicidad. Cerré los ojos para abrir mi mente, y entonces lo vi claro, salí a flote, solté lastre dejando atrás uno a uno cada uno de los motivos que me impedían avanzar en el fondo de aquel mar en calma, cogí el timón con todas mis fuerzas y puse rumbo norte, más norte que hoy, más frio que ayer, más diferente que nunca.

miércoles, 13 de julio de 2011

Lo más importante.



- Hoy, para mí tú eres lo más importante.
- No me gusta cuando dices eso. Yo no soy lo más importante, ni tus amigos, ni ese estúpido perro que no para de ladrar y que tienes terriblemente consentido. Lo más importante eres tú, y tú haces que yo, que tus amigos, incluso que ese montón de pelos tengamos valor. Gracias a ti nosotros nos sentimos importantes, gracias a ti lo somos, por lo tanto eres lo más importante porque sin ti ninguno de nosotros podría serlo.
-Hay días que eres asquerosamente sorprendente.

lunes, 27 de junio de 2011

Nunca me digas nunca


Hazme un favor y enladrilla el cielo,
porque hoy no quiero ver llover,
hazme un favor y olvida tus miedos,
porque hoy no quiero ver llover.
Hoy quiero ser un gigante,
hoy quiero ser imposible,
quiero escribir sin pensar,
y pensar sin parar de escribirte.
Juguemos hasta perdernos,
soñemos hasta cansarnos,
olvidemos que esto es un cuento,
bailemos sin preocuparnos.
Quiero, y no quiero,
te quiero,
quiero y no puedo,
te extraño,
y es que hoy tan solo quiero…

…que nunca me digas nunca,
dime siempre una vez más.

lunes, 20 de junio de 2011

Yo al cuadrado


Quieres escribir algo pero no sabes que, da igual, empiezas a escribir, la única norma es que no puedes parar, solo puedes escribir lo que tu cabeza en este momento piensa, pero piensa en tantas cosas. Podrías escribir algo sobre ella ¿otra vez? Chico creo que eres un poco monotemático, asúmelo de una vez, se fue y no va a volver, puedes seguir escribiendo esas estupideces, pero no harán que vuelva, ni siquiera Benedetti conseguiría que volviese, nunca los leerá y aunque los leyese, se te pasó el arroz, has perdido tu oportunidad. Será mejor escribir algo sobre ti, ya está, algo de cuando eras pequeño, tenías tanta imaginación, nunca perdías la sonrisa, cosa que no era muy difícil pues tenías por dientes auténticas teclas de piano, incluso cuando te querías enfadar no los conseguías esconder y parecía que te estabas riendo, era tan frustrante ¿No se te ocurre nada? Pues invéntate una de esas historias de chico conoce a chica, reconoce que te encantan, ya sabes una historia de amor original con un final feliz pero lo suficientemente amargo para que no sea empalagoso ¿Sigues en blanco? Vaya, amigo creo que eres un fraude, a gente como tú le debería estar prohibido tener un blog. Mejor me voy, no sabes cuánto me estás aburriendo hoy.

martes, 14 de junio de 2011

Él


Es diferente. Hay algo diferente. Te sorprende, te está ganando, te gusta. Pero es que es tan diferente, ¿Por qué demonios te gusta? No se parece en nada a Él, te ha costado olvidarle, pensabas que no ibas a poder sentirte igual de cómoda con otra persona, y ahora resulta que ahí está, lo tienes justo delante, pero es tan diferente, que te echa para atrás. Tiene lógica, lo tuyo con Él salió mal, porque narices ibas a buscar una persona exactamente igual que Él. Da igual, aunque pueda ser, aunque seáis compatibles, saldrá mal, lo tuyo con Él era perfecto y salió mal, siempre salé mal, y luego te toca sufrir y ya no quieres sufrir más, te has cansado de que te tomen el pelo. Aun así te arriesgas, apuestas de nuevo, coges aire y le pones ganas, esta vez no será igual, estas más preparada, esta vez quieres ganar. Lo consigues. Él se ha ido, ahora Él tiene otro nombre, es otra persona, y te hace reír, te hace feliz, hace que los días pasen deprisa, y que constantemente tengas ganas de verle. ¿Y ahora qué? Quieres saber que va a pasar, quieres saber si durará, quieres saber tantas cosas. Lo siento, esta parte te toca a ti, tú eres la única que puede escribir el final.

viernes, 10 de junio de 2011

Macario


De pequeño como casi todo hijo de vecino me encapriché con tener un perro, recuerdo que estuve un verano entero tratando de convencer a mí madre de las ventajas que un perro podía aportar a su vida, desde bajar todos los días la basura hasta protegernos del extraño señor de bigote que vivía en la puerta de enfrente. Lo curioso es que los perros siempre me gustaron más bien poco, la única razón de mi interés por tener un perro residía en que se llamase Macario. La televisión ya me empezaba a hacer daño, y por aquel entonces Marco buscaba desesperadamente a su madre por el mundo con la única compañía de su mono Amedio. En España no abundaban los monos, pero sí que había muchos perros y desde luego no había mejor nombre para un perro que Macario, sin duda el nombre era lo que más me gustaba de la idea de tener una mascota. Aquel verano me lo pase imaginando las aventuras que yo y Macario podríamos estar pasando y que nos estábamos perdiendo. El verano acabó y no logré convencer a mi madre con ninguno de mis argumentos, después de aquello nunca más volví a insistir con el tema. Meses más tarde para mí cumpleaños mi madre me regaló un pez que se llamaba Macario, supongo que una de las ventajas de ser padres es que te puedes reir de tu hijo de vez en cuando.

jueves, 9 de junio de 2011


¡Vaya!, hoy es uno de esos días en los que te hecho de menos...

jueves, 2 de junio de 2011

Alquimia de lo imposible


La obviedad se hizo verbo cuando dijiste que te marchabas, con cuidado recogiste tus palabras y el silencio ocupó la habitación. Besamos un adiós, arañamos el tiempo, y en la brevedad de la despedida recuperamos lo perdido. Definimos distancia, alegamos demencia, perdimos contacto, terminó, se acabó, capricho de chocolate volver a tenerte, verano para olvidarte, norte para no verte. Ahora te pinto bigotes en las fotos que nunca te hice, y aun así conservas tu encanto, maldito subconsciente, me engañas, me haces daño. Supongamos suposiciones, y por suponer supongamos que lo nuestro no fue más que una alquimia de lo imposible a la que Paris quedaba demasiado lejos.

jueves, 26 de mayo de 2011

Arrabal amargo


Salí de mi arrabal engalanado, recién me había afeitado y me había engominado el pelo; llevaba puestos mis más limpios tamangos, y mi mejor traje, bueno, en realidad mi único traje, con la sola intención de disfrutar del tango en la milonga más popular de todo Buenos Aires, milonga "La Catedral".

Ya al entrar, me quedé impresionado con la decoración compuesta por innumerables elementos artísticos hechos con desechos, un piso alfombrado en el que reposaban cantidad de sillas y mesas repletas de velas que daban un calor especial al ambiente. Llegando a la pista de baile me llamó la atención un gran quilombo que había allí formado, me acerqué y me encontré con un montón de hombres deseosos de bailar un tango con una mina que se estaba fumando un pucho en medio de aquel gran corro como si la cosa no fuera con ella.

Cuando comenzaron a sonar los primeros acordes de aquel tango de Gardel esa papirusa se acercó a mi con mirada penetrante, me abrazó y juntos bailamos un tango con el que los allí presentes enmudecieron ; un tango sensual a la par de elegante , un tango sexual y casto a la vez , un tango en el que dos personas se fundieron hasta casi formar una sola y cuyos labios solamente los separaba el ancho del tallo de una rosa y cientos de discordantes intenciones.

Terminó el tango y con él todo lo que había surgido en un solo baile, desapareciste para siempre y desde entonces me he quedado piantao bailando al son de una música que no volverá a sonar y canturreando sin cesar aquel tango de Gardel

"...Arrabal amargo,
con ella a mi lado
no vi tus tristezas
tu barro y miserias...".


HAIKU DE LA SEMANA:

Experimento fallido
Vuelo en gravedad,
rijo el tiempo a mi antojo
mas no te olvido.

CANCIÓN DE LA SEMANA:


lunes, 23 de mayo de 2011

Economía


En las gráficas pude ver que mi demanda superaba tu oferta, así que por un tiempo me encerré en la biblioteca desarrollando un ambicioso plan de marketing. Quería descubrir la elasticidad de tu cuerpo, la indiferencia de tus curvas, maximizar tu beneficio, encontrar tu punto muerto. Después de dejar algo de propaganda en tu móvil, me preparaste un presupuesto lleno de cuentas pendientes en tu haber cargadas a mi deber, así que compré todas y cada una de tus acciones para disfrutar en privado de tu alta rentabilidad. Amorticé día a día tu compañia, investigué la longitud de cada una de mis caricias, y encontré en ti el óptimo para ser feliz. Al final, se nos acabó el crédito, perdimos la imaginación y nos olvidamos de como soñar, nos olvidamos que aquello era más complicado que la economía y que las formulas las teníamos que inventar, nos olvidamos tan fuerte que al final sonó Crack, nos olvidamos tan fuerte que al principio le llegó su final.

Hoy Hacienda me ha llamado y me ha informado que el tiempo contigo ha desgravado, así que me devuelven todo lo vivido junto a tí en forma de recuerdos para que pueda disfrutarte poco a poco.

martes, 17 de mayo de 2011

Concédeme un instante


Concédeme un instante, un puente entre tu mirada y mis palabras, un rincón libre de mentiras, de creencias, de apariencias, libre de contenidos vacíos. Concédeme un instante, un minuto, quizás dos, permíteme parar el tiempo, levantar la verja que te protege y verte tal como eres, desnuda de emociones, sin caretas, sin miedos, sincera. Déjame entrar, colarme, acompañarte, alojarme en tu cuarto de estar, prometo dejar mis cargas en la calle y limpiarme los zapatos antes de entrar, déjame alejarme para echarte de menos, perderte para no olvidarme de lo que es tenerte, quererte para no irme nunca más. Tan sólo concédeme un instante, un punto y aparte, concédeme una historia que inventar.

sábado, 14 de mayo de 2011

LA MUERTE DEL CANARIO


Quedan 5 minutos de camino hasta llegar a la mina y comienza a brillar el Sol, he de aprobechar estos minutos porque hasta mañana no volveré a verlo; hasta entonces la única luz que me alumbrará será la de mi candil, y el único brillo semejante al del Sol será el de esos malditos diamantes por los que mi vida ha sido esclavizada.

No sé cómo es el amanecer en otros lugares, pero aquí en Sierra Leona tras el horizonte aparece enorme el Sol, como enormes son sus ojos; un halo de calor te abraza y te hace olvidar por un momento el dolor de las argollas amarradas a los tobillos, como ella da calor en cuerpo y alma y me hace olvidar a cada instante esta vida en suplicio; la luz inunda el camino, y permite a la vista cumplir con su función, igual que ella ilumina la senda de una vida a la que sin su presencia el universo sería finito, el cielo tornaría en gris y la Luna perdería su sonrisa.

Me llevan a una galería y encadenado al techo pico, pico y pico sin parar con el único objetivo de extraer algún diamante con el que adornar al caprichoso e hipócrita primer mundo. En ocasiones encuentro fragmentos de piedra pómez con los que froto mis manos para que no se me formen durezas y así mis caricias no rasguen tu cuerpo y te hagan daño.

Jamás hubiera imaginado que en aquella nueva galería estaba picando mi propia tumba; la muerte del canario hizo morir también las esperanzas de volver a ver el Sol, las esperanzas de volver a verte. Instantes antes de morir froté mis manos con piedra pómez para que mis caricias no rasguen tu cuerpo y te hagan daño, pues desde el mas allá te visitaré en el mundo de los sueños.


HAIKU DE LA SEMANA:

Efecto mariposa
Me mira y miro,
cosquilleo en el estómago
me besa y beso.

CANCIÓN DE LA SEMANA:

lunes, 9 de mayo de 2011

Lunes de Café


Casi sin querer te quise y ahora que quiero no puedo quererte, casi te olvidé y aun así no te olvido, casi lo consigo, el tiempo pasa lento, pero pasa. De momento adoro esta demora, adoro el retraso con el que la mezcla entre distancia y tiempo borra tu recuerdo, así que me entretengo pensándote, desnudándote en pasado, idealizándote en presente y olvidándote en futuro. Recuerdo y comparo, comparo y no olvido, escribo y escribo, y solo entonces me siento bien, no importa no tenerte, ni lo lejos que están tus ojos de mis palabras, escribo y escribo, disfruto, sonrió. No niego mi obsesión ni tampoco mi estupidez, pero al menos ya no me castigo, ya no pienso en los quizás, en los podría haber sido, no pienso en los errores, ni te pinto adjetivos, ya no trato de entenderlo, existo feliz y cautivo, porque lo que nunca podré negar es que fue real y fue bonito.

sábado, 7 de mayo de 2011

FAES 38

Me encuentro frente a frente con la puerta de tu casa, han pasado muchos años, un par de décadas para ser exactos , veinte años de aquel último café juntos, veinte años de nuestras miradas, veinte años sin ver tu sonrisa, sin hechizarme con tu voz, sin estremecer con tus caricias , sin encontrarme a gusto en los silencios incómodos. No se muy bien que hago aquí, ni que sentido tiene después de tanto tiempo aparecer aquí con un bebé de plástico en una mano , y una caja de bombones en la otra, supongo que hoy es uno de tantos días en los que alguien pasa por tu mente, anida en ella y necesitas hacer alguna estupidez.

Me disponía a picar cuando se abrió la puerta, y oí una carcajada; inconfundiblemente eras tú, ibas hablando por teléfono (nada raro en ti la verdad); cerraste la puerta sin hacer mucho ruido, caminaste a través del jardín y saliste a la calle donde estaba yo seguramente tembloroso y carcomido por los nervios después de tanto, tanto, tanto tiempo; cuál fue mi sorpresa cuando me miraste, te quedaste extrañada y me deleitaste con un cordial "buenos días" con el que seguiste tu camino sin mirar atrás.

Suerte que hoy no "faes" 38 sino la mitad, suerte que todo este tiempo que hemos perdido aún no es tanto y aunque espero que no haya sido perdido, sino invertido en añoranza, se que debo seguir guardando silencio, refugiado en el manto de esta isla , rodeada por agua y enraizada en ti.

HAIKU DE LA SEMANA:

Olvidado
Baja he causado,
mi foto se ha velado
en tu anuario.

CANCIÓN DE LA SEMANA:
quiero hacerte un regalo...

lunes, 2 de mayo de 2011

Beso, Besa, Besamos


El silencio interrumpió el intercambio de monosílabos. Y casi sin querer, se atrajeron, y casi sin querer sus labios se tocaron por primera vez. Aturdidos, dejaron que el silencio se comiera las palabras mientras un largo abrazo decía lo que sus bocas eran incapaces de decir. Disfrutaban de la diferencia de esa experiencia, expertos ahora convertidos en aprendices, novatos con ganas de aprender, de querer, de sentirse queridos.

Y poco a poco aprendieron a perder el miedo, y poco a poco la sensación de vertigo que había inundado sus estómagos durante horas, dias y semanas, se cambiaba por una sensación que casi parecía parar el tiempo. Recuperaron la palabra, la voz, se dijeron cuatro tonterias, y dejaron que cada sonrisa, que cada mirada, dijese las palabras que sus bocas aun seguían siendo incapaces de decir.

No se dijeron adiós. Nunca más se dijeron adios, a partir de ese día siempre se despidieron con un beso, ni una sola palabra. Decían que del mañana se sabe poco, que es imprevisible e incierto, así que si mañana las cosas se torcían, si resultaba que no se volvían a ver más fuese por el motivo que fuese, al menos siempre les quedaría el buen sabor de boca de ese último beso.

viernes, 29 de abril de 2011

La gravedad del desamor


Hoy sentado a la sombra de la pirámide de Keops le doy mayor relevancia a la teoría que un ingenio loco me contó alguna vez sobre su construcción. El hombre defendía que los egipcios no pudieron ser los ejecutores de aquellos monstruos piramidales, que tuvo que haber algún tipo de fuerza mayor que lograse mover aquellos gigantescos bloques. Dejando a un lado la opción de que haya sido una obra extraterrestre, este genio me habló de la "antigravitación", por mucho que aquel hombre me explicó jamás fui capaz de entender del todo aquel concepto.

Pero un día hubo algo, un antes y un después que hizo que todo encajase,hizo que todas aquellas teorías discordantes de pronto destacasen por su cordura; solamente un beso hizo despegar mis pies del suelo ; pero mayor fue mi sorpresa cuando al destapar tu cuerpo descubrí todos y cada uno de los secretos de la trigonometría, tus ojos escodían la inmensidad del Nilo y tus palabras el calor del desierto. Recordé las palabras de aquel loco, él tenía razón, la antigravitación era posible y tú podías dominarla; cuando te conté la historia del sabio sonreiste y me explicaste que no era antigravitación, sino amor.

Fue una pena el día en que todo en ti tornó en geroglíficos incomprensibles para mi intuición incapaz, el día en el que tus besos dejaron de llevarme a las nubes, el día en el que tus ojos miraron para otro lado, tus palabras fueron enmudeciendo y tu cuerpo y con el los secretos de la trigonometría, de los cuales no había cogido nota, se fueron para siempre de mis manos; se acabó el amor y con él la antigravitación y desde entonces la humanidad vive engañada por la gravedad de este desamor.


HAIKU DE LA SEMANA:

TORMENTA
Te vi estremecer
inundando tu mirar,
me mató el dolor.


CANCIÓN DE LA SEMANA:
¿te suena?

lunes, 25 de abril de 2011

Ayer


Ayer me cansé de la espera, ayer puse la cara B de la cinta y no sonaba tan mal. Ayer dejé caer cien maldiciones rotas, prolongué la distancia entre tu boca y mi boca, borre la nostalgía, difuminé tu esencia, aborrecí tu presencia. Ayer se murió el recuerdo, olvidé tu nombre, ayer desapareciste sin dejar una nota de donde podía encontrarte, ayer olvidé soñarte, olvide lo que era besarte, ayer me olvidé de tí.

Hoy no he tenido tanta suerte...

domingo, 24 de abril de 2011

Ensalada miXta


Hay dos cosas en esta vida que siempre crean polémica, la teoría de la relatividad de Einstein y el color de las partes púbicas de un pelirrojo. Y puestos a decir verdades, dicto sentencia, pues deberías saber que aunque sea carnaval y te puedas disfrazar de cualquier cosa, un disfraz de puta siempre será un disfraz de puta, no digo que me moleste, pero no te enojes cuando se produzcan las confusiones. Otra verdad, es que odio a Justin Bieber, sin más razones que ninguna, odiar por odiar, dejarse llevar, pero de alguna manera un tanto morbosa tengo intriga por saber a que edad comenzará su nariz a ser un orificio de entrada y no de salida, llamadme raro.

Quizás sea la falta de agua en mi cuerpo producida por un hígado que hoy se encuentra totalmente desinfectado, pero hoy creo con todo mi corazón que los bigotes deberían de volver a estar de moda, bigotes: largos, cortos, finos, enrosacados, amarillos por el tabaco, bigotes teñidos, señoriales, o los siempre desagradables pero no menos clásicos bigotes de señora. Y por último añadir que las películas son una mierda desde que los protagonistas ya no se pasan el día fumando.

La verdad es que hoy hace tormenta y noto ciertas interferencias en mi cabeza, así que lo mejor será desconectar y dejar que la lluvía lo moje todo.

sábado, 23 de abril de 2011

Insípido transeúnte


La gente habla, argumenta, sentencia. Se popular, majo, fabrica sonrisas, labra tu éxito, no te salgas del guión establecido, porque sino la gente hablará, argumentará, sentenciará. Pon tu mejor sonrisa, que tu novia levante envidias, que tu coche acerque compañias, que tu música este de moda entre tus amigos, porque sino la gente hablará, argumentará, sentenciará. Viste caro, ve la televisión que tus amigos ven, opina lo que todo el mundo supone que tienes que opinar, porque sino la gente hablará, argumentará, sentenciará. Piensa más en el futuro que en el presente, twitea, chatea, posturea, esconde tus miedos, se normal, común, no llames la atención sino es para triunfar, porque sino la gente hablará, argumentará, sentenciará...

Se uno más, o se tu mismo. Tu decides.

lunes, 18 de abril de 2011

Cuestión de Lógica


Quizás no haya vivido lo suficiente como para dar consejos, quizás piense que los consejos son cosa de egocéntricos con ganas de atención, quizás me esté contradiciendo pero hoy voy a darte uno. El tiempo todo lo cambia, eso es cierto, lo que hoy piensas mañana lo aborreces, lo que ayer detestabas hoy lo pones en un altar, pero a día de hoy de lo único que puedo estar seguro es de esto que te voy a decir.

La lógica es una cruel mentirosa, nunca, repito, nunca te fiés de la lógica, solamente es una mala consejara, una falsa acompañante dispuesta a llenarte la cabeza de porcentajes y datos que perderan toda su importancia cuando la excepción te joda la estadística. No cuestiono la lógica de la naturaleza, si algo sube va a volver a bajar, dos mas dos mañana seguirán siendo cuatro, cuestiono la lógica que me rodea a mi, que te rodea a tí. El ser humano es imprevisible, está fuera de toda lógica, impulsivo, estúpido, y además siempre tiene a su disposición sustancias que le pueden hacer parecer incluso más estúpido, con semejante panorama, puedo afirmar y afirmo que la lógica nunca puede estar relacionada con alguien como nosotros. No es fácil no fiarse de ella, se esconderá detrás de la motonía, te engañará con la rutina de tu día, haciendo que pienses que mañana será igual que hoy con la única diferencia de si el café que te tomás por la mañana es solo o con leche, pero esto nunca es así. Lo justo e imposible, sería vivir cada día como si fuese el último, tratar cada situación como si fuese única, dejar de perdernos los cambios de los que a diario somos testigos, pero no lo hacemos , y así una y otra vez nos dejamos caer en el encanto de sus palabras dejando que un día la lógica por sorpresa de paso al sinsentido y la irracionalidad.

Solo me queda decirte que cuestiones cada palabra que te digan, incluso estas que hoy estás leyendo, no te dejes engañar por porcentajes, estadísticas y afirmaciones que incluyan la palabra siempre, porque te puedo asegurar que si el ser humano tiene algo que ver, la lógica pierde todo su significado y solo nos queda dejarnos llevar.

jueves, 7 de abril de 2011

TIERRA


Día a día desde que un truhán robó el tesoro de mi isla, he ido perdiendo poco a poco todo aquello que poseía, primero fue mi loro quien me dejó cansado de ser la voz de mi conciencia silenciada por su voz en el recuerdo , después mi tripulación cansados de encontrar valiosos tesoros, los cuales ordenaba dejar donde estaban , ya que todo aquel oro y todas aquellas joyas no valían nada si no podía compartirlas con ella; también los efectos del ron me dejaron de lado, parecía que su falta, inhibía los efectos de hasta entonces mi mas fiel compañero.

Cada día me levando y todo sigue igual, subo a cubierta y ahí están babor en babor y estribor en estribor, la proa y la popa siempre dándose la espalda, rodeado de agua , agua y mas agua donde el horizonte apoderado de tu recuerdo, marcha a lo lejos sin que pueda alcanzarle. Me paso los días sacándole brillo a mi garfio, barnizando mi pata de palo, dejando que los vientos del Caribe guíen el timón de mi vida, el cual no soy capaz de dirigir desde que te fuiste; dejando que durante el día el sol me fustigue con sus látigos ardientes y que en la noche la tempestad de la añoranza me deje en vilo vaciando botellas de ron mientras me zarandea de un lado a otro de mi camarote.

Vivo inmerso en la desesperada esperanza de llegar algún día a tierra, volver a encontrarte, de poder batirme en duelo por ti para volver a ser aquel pirata que fui conquistador de mil tesoros y capitán del barco de tu amor … ¡ahí va!… ¡por las barbas de Neptuno¡ ¿¡ pero qué ve mi ojo!?… ¿tierra?, ¿es tierra?…¡¡¡tierraaa!!!.




-HAIKU DE LA SEMANA-

Amanecer
Curioso mirar,
contagias tu luz propia
con solo un guiño.

-CANCIÓN DE LA SEMANA-
buuu!!!...XD


domingo, 3 de abril de 2011

Miércoles


Día 1: No te conozco, no se quien eres, no se siquiera tu nombre ni tu número de telefono, pero por alguna razón no he podido parar de mirarte.

Día 2: LLevaba una semana sin verte, una semana tratando de recordarte, tratando imaginarte, pero la realidad ha superado con creces mi imaginación. Has cogido el bus exactamente a las ocho y cinco, parece que solo lo cojes los miercoles a esa hora.

Día 3: Ahi estás otra vez, de nuevo es miércoles, entrás la última de la cola y cojes un sitio de dos plazas pero pones en una el bolso, hoy no quieres compañia. Sacas tu Ipod, apoyas la cabeza en el cristal y desconectas, borras el mundo de tu cabeza y dejas que hoy solo te acompañe la música.

Día 4: Hoy has traido un libro, te has puesto a leerlo desde el primer momento. No he conseguido leer el titulo, pero era un libro grande, eso significa que te gusta leer. Me gusta la gente que le gusta leer, ¿Quizás algo de Millás o de Javier Marias? ...No...te pega más algo exótico, algo más internacional... Aun no he decidido que libro leías.

Día 5: Quizás debería levantarme, quizás debería sentarme a tú lado, quizás acercarme y hablar de la música que escuchas cada mañana, pero en mi cabeza me ha dado por pensar que escuchas a algun artista decadente del pop británico de los 80 y no tengo ni idea de esa música, asi que no me levanto, no me acerco, no te hablo.

Día 6: Soy un experto en el Pop británico de los 80, al menos sé todo lo que pone en Wikipedia. También me he mirado el de los 90, últimamente no se que decada te pega más. Pero todavía sigo siendo un cobarde y sigo sin hablarte.

Día 7: Hoy te has sentado a mi lado, puede que hubiera sido un buen momento para hablarte, pero no me había hechado colonia y mi madre siempre dice que cuando hablas con un hombre que no huele a nada, es como si hubieras hablado con un hombre que no hubiera dicho nada, asi que he preferido callarme.

Día 8: Hoy he cogido fuerzas, me he levantado y he hablado contigo. Resulta que eres gilipollas...


Ilusiones matinales convertidas en nada. Dulce espera para tan agrio desenlace. Historia sin princesa a la que rescatar, habrá que esperar, habrá que esperar...

jueves, 31 de marzo de 2011

Sinfonía en clave de afonía


Era la hora, por fin había llegado el momento, íbamos a estrenar nuestra sinfonía en la Concert Hall de la Ópera de Sidney , más de dos mil seiscientas almas resumidas en dos cuerpos. Se levantó el telón, compartimos entre nuestras manos la batuta que con la que dirigir la orquesta.

Comenzaron los violines con una intensidad de menos a mas , pasando de un piano a un mezzo forte regulados por la intensidad de nuestras caricias; la temperatura iba subiendo y la llegada a su punto mas alto fue la señal para que violas y violonchelos entrasen como un torrente enloqueciendo nuestras hormonas, dejamos que el clarinete luciera su expresividad al compás de nuestros susurros, flautines y fagots fueron los encargados de marcar entonces el ritmo a costa del vaivén de nuestras figuras cohesionadas hasta que en el momento mas álgido de la pasión trompetas, tambores y tubas irrumpen con fuerza para llevar hasta el éxtasis mas absoluto a nuestra sinfonía. Tras un silencio de corchea comenzó latente el sonido del arpa al son del amor del latir de nuestros corazones finalmente fue la trompa la que tras el ultimo beso de despedida marcó el final de esta sinfonía.

Hemos perdido la batuta, y es desde entonces que los silencios de negra han inundado nuestros pentagramas enmudeciendo al clarinete dejando nuestra sinfonía en clave de afonía, los violines y las violas se han enredado con sus cuerdas, los flautines, fagots, trompetas, tubas y tambores han desaparecido y a trompa cada vez aparece con una trompa mayor y aunque pueda parecer que suenan tambores de guerra, en realidad solo queda el latente arpa que aunque no pierde en fuerza si gana en desesperación.

-HAIKU DE LA SEMANA-

Cambio, con m antes de b
Rocío en Rosa
a Esperanza me Amparo
por Alma y su Luz.


-CANCIÓN DE LA SEMANA-

...no se si será el amor.

domingo, 27 de marzo de 2011

¡Pardiez!



Disparabas gigantes con pistolas de juguete, perseguias elefantes verdes y soñabas pesadillas donde la gente no tenía miedo. Aquel día,llenaste de adjetivos cien mentiras, escribiste cinco artículos, y sentenciaste un pretexto por el que se dedujo que eras feliz. Lúnatica ludópata de los juegos del corazón, me pediste milagros, pero ya solo me quedaban miserias. Ruinas hundidas bajo un sobrenombre, lloros y lamentos que dejaban que la brevedad del momento se difuminase entre la nostalgía del pasado.

Ahora, río, lloro y vuelvo a reir, amargo desencanto con sabor a bilis fruto de un whisky demasiado destilado. Calmo mi cuerpo, no mi mente, y dejo que un libro haga de improvisado analgésico frente a este insípido horizonte. Pido más, sin saber que más pido, mientras bailo sobre la incertidumbre de este día gris.

Me dormi ebrio, me desperté elocuente. Dulce éter.

miércoles, 23 de marzo de 2011

El último avión de papel

Que bellos tus ojos después de tanto tiempo, siguen tan llenos de vida como siempre, pero ahora están cargados de experiencia. Sigues teniendo esa sonrisa tan peculiar, tal cual la recordaba rasgada por el tabaco pero pulida por el roce de tus labios. Es increíble que hoy tus hijos tengan la misma edad que teníamos nosotros la última vez que nos vimos, aquella vez que nos despedimos bajo este mismo árbol que fue testigo de aquel amor y de todo el revuelo posterior, y al que no he vuelto a visitar desde aquella noche del 61 en la que un muro se alzó para separarnos durante casi tres décadas, un muro que separó nuestra ciudad en dos, nuestro país en dos y convirtió nuestra vida en nuestras vidas.

¿Qué le vamos a hacer?, nos tocó vivir una época dura de la historia, nadie podía prever que aquella noche iba a ser la última en mucho tiempo, o quizás la última para siempre. Es incríble que de un día para otro se pueda construir algo tan enorme y que a su vez tantas cosas aún mayores decoradas por universos de pequeñas cosas, se vengan abajo. No sé porque recuerdo que aquel día te dije adiós en lugar de hasta luego, quizás fue algo premonitorio, quizás por eso me quedé parado mirándote mientras te alejabas como siempre hacía, pero esta vez mucho mas tiempo, tanto tiempo que realmente la última imagen que tuve de ti, eras un punto lejano en aquel apagado Berlín.

Hoy 28 años después hemos vuelto a encontrarnos pero ya nada es lo mismo; tú a diferencia de mi has rehecho tu vida te has casado, has sido madre y vas camino de ser abuela; yo sin embargo no he hecho mas que sobrevivir a base de cartillas de racionamiento y aseándome con poco mas que agua de lluvia, con la única preocupación de escribir cada día una carta para enviártela cada noche a modo de avión de papel. He visto morir decenas de personas intentando librar esta montaña artificial, unos fusilados, otros por el golpe de la caída, y los mas desafortunados enredados en el alambre de espinas; tal vez debí haberlo intentado yo también, ahora me doy cuenta de que de haberme jugado la vida entonces, no me estaría matando ahora.

Tan solo me queda el consuelo de que tu también has vuelto aquí, a mi encuentro, asi que puede solo puede, que en lo que nos queda, algún día nuestras vidas vuelvan a ser nuestra vida.



-HAIKU DE LA SEMANA-

Día a día
Donde es la aurora
un tren destino a Marte
destino amarte

-CANCIÓN DE LA SEMANA-
...donde hubo vuelo solo ha quedado escombro de plumas...
http://www.youtube.com/watch?v=PDT6Fb1jwAg

domingo, 20 de marzo de 2011

Cartas Intemporales


Desde hace algún tiempo se me ha metido una tontería en la cabeza, una estupidez que no consigo dejar de pensar, una locura propia de un chiflado, esta estúpida y loca tontería es que te quiero. No te quiero mucho o poco, no te amo ni te adoro, simplemente te quiero. Has de saber que no se querer con flores, prisas ni apariencias, a veces incluso se me olvida como querer, pero sé que te quiero, y lo sé cada vez que te veo reír, cada vez que me das un beso sin que te lo pida, incluso cada vez que me insultas.

Ahora me creo loco, chalado, lo cierto es que creo haber perdido la cabeza. Apenas te conozco, apenas hace unos cuantos meses que entraste en mi vida, apenas te he visto llorar o dormir, y ahora resulta que te quiero, pero por alguna razón que todavía no me explico, también te necesito. Necesito hablar contigo, discutir, necesito echarte de menos, o hacerte sonreír. Haces que pierda la razón, la compostura, la sensatez, incluso la noción del tiempo, haces que me pierda en mil horizontes pero solo tú haces que me vuelva a encontrar, solo tú eres capaz de que esta locura improvisada tenga sentido.

Así que si esto es una locura, si lo nuestro no es más que una demencia pasajera, yo no quiero tratamiento ni medicación, quiero disfrutarte sin loqueros ni prozac, sin drogas ni alcohol, solamente ebrio de ti, borracho de este delirio, simplemente quiero disfrutar esta imprudente enajenación contigo.

miércoles, 16 de marzo de 2011

Un ola y un adiós


Estiman más de 10 mil muertos por terremoto en Japón.

Japón: 10.000 personas desaparecidas en el puerto de Minamisanriku.

Hallados entre 200 y 300 cadáveres en la costa de Sendai.

...y así cientos de cifras , un montón de datos sobre una catástrofe natural sin precedentes, tras los que se esconden miles, tal vez cientos de miles o millones de pequeñas pero desgraciadísimas historias como la que me acontece , historias en las que un hola se transformó en ola y esta en adiós.

Aquel día parecía un día cualquiera y aunque desgraciadamente tornó en inolvidable , en principio lo era. Aunque a ti no te gustaba mucho, logré convencerte para ir a dar un paseo por la playa, cogimos un tren a las afueras y unas pocas paradas después nos bajamos en el centro de Fukushima, bajamos a la arena hablamos en nuestro propio idioma como siempre nos había gustado hacerlo, un idioma en el que el significado de las palabras estaba en la mirada, enlazamos nuestros cuerpos en un montón de abrazos covalentes y nuestros besos ponían paz en el propio Pacífico.

Tras esto yo volví para casa y tu te quedaste haciendo unas compras; te encantaba comprar, ver tiendas y pasear por la ciudad, decías que era porque en tu pueblo no había escaparates; yo sin embargo urbanita de nacimiento, lo aborrecía por eso no me quedé contigo, y por eso maldigo el momento en el que decidí marcharme y no disfrutar del privilegio de estar siempre a tu lado. Porque a la media hora ocurrió la tragedia, irónicamente el mismo agua que me había refrescado el día ahora me quemaba el alma y el océano que alardeaba de pacífico me declaraba la guerra llevándose todo, y de entre todo a lo que mas quería, llevándose a Yoake, sembrando en mi vida hectáreas y hectáreas de lodo bajo el cual no queda nada. Me culpo de no haber estado a tu lado para protegerte de aquel gigante llamado Tsunami, ese ladrón que me robó lo que mas quería, ese cobarde del cual el ahora nuevamente tranquilo Pacífico no me dice nada.

Desde entonces a mi tampoco me gusta la playa, ni siquiera esa playa sin agua; qué es una playa sin agua sino un desierto y qué es una vida sin ti Yoake sino una muerte que aún palpita y en la que lo único que me consuela es que ahora vivo en una nube radiactiva que unida a este lunar de mi pecho pronto me darán un billete de ida con destino tus brazos.



- HAIKU DE LA SEMANA-

Otoño
Fatal costumbre
besar hojas marchitas
esclava vida.


-CANCIÓN DE LA SEMANA-
El peligro es cuando queman las entrañas,
por amor o desamor que mas me da...



domingo, 13 de marzo de 2011

Supuestos Equivocados



Supuesto 1: Lo cierto es que has empezado a engordar, y el pelo se te está cayendo. Ella no es perfecta y lo sabes, pero a estas alturas sería difícil encontrar a alguien mejor. Tus amigos ya se han casado, incluso los más feos ya han dicho el sí quiero. En cada cena familiar os preguntan por la fecha de boda, por tener hijos. Ya vivís juntos, y la convivencia no es tan mala, todo está más limpio y más recogido, es cierto que discutís alguna que otra vez pero dicen que es normal cuando hay demasiada confianza. Así que coges y vas a la joyería más cercana, compras el anillo que te dice una de las dependientas y lo pones encima de la mesa en el restaurante más lujoso y caro de la ciudad.

Supuesto 2: Ya no le quieres, sientes que cada vez que habla te gusta menos, que estaría más guapo callado. Las manías y estupideces que un día te llamaron la atención ahora te repatean, te sacan de quicio. Cualquier conversación entre los dos acaba en una discusión, y eso cuando habláis, porque de repente cuatro años después os habéis dado cuenta que no tenéis conversación, a ti no te interesa el futbol ni a él le interesa hablar. Pero le tienes cariño, y además puede cambiar, ya tienes treinta años y muchas ganas de tener un hijo. Casados y con un hijo todo será diferente, él se volverá más cariñoso y te prestará más atención. Así que dices que Sí.

Supuesto 3: Desde que naciste no recuerdas una comida sin gritos ni discusiones, así que procuras comer solo. Ya ni cuando sacas buenas notas evitas que discutan. Cuando te portas mal es cuando todo resulta perfecto, los dos se ponen de acuerdo en reñirte, después de mucho tiempo los dos están de acuerdo en algo y encima te prestan atención. Mereció la pena. Tus padres se divorcian, tú no crees en el amor, te dedicas a conocer chicas crédulas y enamoradizas, les dices lo que quieren oír y consigues lo que quieres.

Supuesto 4: Hoy te has dado cuenta que el no te quiere, que solo quería lo que quería, y te preguntas ¿Por qué he sido tan tonta?

Víctimas de errores encadenados, náufragos sin rumbo, corsarios sin timón. A veces hacer las cosas bien no cuesta tanto.

jueves, 10 de marzo de 2011

Crepúsculo eterno de la aurora


Jamás había estado en un mercado tan extraño como aquel, no se oía ni una voz, apenas había una o dos personas comprando, los comerciantes me miraban en silencio de forma siniestra como si desconfiaran, como queriendo decirme algo pero sin decir una sola palabra; los productos que se vendían también eran bastante raros, desde raíces de bonsai, hasta colmillos de tritón pasando por lágrimas de cocodrilo, ojos de cabra...¡incluso el himen de una virgen!.También el clima era peculiar, en apenas dos horas llovió, hizo un sol agotador, granizó... incluso juraría que los árboles se deshojaron, florecieron y dieron fruto en ese rato. Pero de entre todos aquellas rarezas había dos que me hacían estremecer especialmente, la primera era una intensa niebla que tan pronto inundaba todo en un instante y apenas se veía mas allá de un palmo como desaparecía cual lagartija asustada; la segunda era la sensación de ser observado por alguien oculto y no solo eso, sino que a ratos escuchaba mi nombre pero nadie a mi alrededor me estaba llamando.

Poco a poco inconscientemente iba alejándome del centro de Transilvania y me iba adentrando en el bosque, camino de las montañas, donde oía mi nombre cada vez con mayor intensidad y con mas frecuencia y donde en un peñasco casi en lo mas alto se encontraba aquel castillo que gobernaba todo a su alrededor. Y hacia allí se encaminaban mis pasos, cuando llegué los portones estaban abiertos de par en par , todo aquello era demasiado tenebroso, así que decidí no entrar en el castillo y volver a la ciudad, fué entonces cuando como de forma intencionada comenzó a llover torrencialmente y no me quedó mas remedio que refugiarme en aquel castillo.

Nada mas entrar los portones se cerraron de golpe y un montón de antorchas se fueron encendiendo una a una a ambos lados de un pasillo larguísimo que llevaba a un altar también iluminado por antorchas, en el que te vi por primera vez. Me hablaste y me dijiste lo que quería escuchar y como lo quería escuchar, como si pudieses leerme la mente, me hablaste de una vida eterna, de la inmortalidad, de la telepatía de dos almas gemelas, cambiaste tu alma con la mía , las mezclase y las volviste a separar, me convenciste de que aceptase tu mordisco y bebiese de tu cáliz de vida para así disfrutar de esa eternidad juntos , para que nuestras sangre, nuestra vida y nuestras almas estuvieran vivos para siempre y así nuestros cuerpos siguieran para siempre estremeciéndose juntos; te creí, me lo creí todo y acepté y así yo también me volví eterno, aprendí a cambiar el clima a mi antojo, a convertirme en niebla a mezclarme con la tuya y a amar tus manos frías. Así nos pasamos 13 eternidades, 13 eternidades que se pasaron volando en las que disfrutamos al amanecer del crepúsculo de cada aurora, del no latir de nuestros corazones, de no vernos reflejados en los espejos pero si en nuestras retinas, del cáliz de cada vida que secamos para compartirlo y mojar nuestras almas.
Pero al final llegó el final, la eternidad pasó a ser inexistente y desapareciste, te convertiste en niebla y sin despedirte te fuiste dejándome cegado por el crepúsculo de tu propia aurora . Te esperé en tu castillo una eternidad y otra y otra mas...así hasta que perdí la cuenta y comprendí que no volverías.

Ahora padezco esta juventud eterna que sin ti es como una vejez efímera tras otra, en la que una herborista del sur intenta crear pociones para curar mis males, para curar tus heridas eternas y transformarlas en efímeras cicatrices y la verdad que aunque no lo consigue del todo y no he recuperado la vista, me alivia, por eso quizás trate de convencerla para convertirla también en vampiresa, y así regalarle la eternidad; pero en mi conciencia aún humana, aún débil pesa tu recuerdo y temo convertir a esta herborista y que al final sea otro alma en pena.

-HAIKU DE LA SEMANA-
Traición
Cual cruel flor ríes
ingenuo colibrí
néctar mortal.

-CANCIÓN DE LA SEMANA-
Porque así lo he decidido

sábado, 5 de marzo de 2011

Ahora...



Ahora que el tiempo gira, cambia, y pierde su color, ahora que el pretérito imperfecto resulta ser perfecto, ahora que las distancias se convierten en fronteras, ahora que camufló mis ensoñaciones en palabras disfrazadas, en textos de juguete, en cuentos de hadas.

Ahora, sobrevivo en la imperfección de mi cautiverio, entre sueños húmedos y besos destilados por el alcohol, difuminado, excluido en un duelo sin pistolas, figurante de una película sin desenlace ni director.

Ahora, que no somos los mejores, desconocidos explorados de un terreno demasiado conocido, ahora y solo por un instante disfrutemos de esta locura sin nombre, de este chiste mal contado, de esta enfermedad terminal.

Ahora, brindemos por ti por mí, por nosotros, por este paraíso, y llenemos esta noche de pecados, porque mañana es Domingo… y al menos, siempre podremos confesarnos.

jueves, 3 de marzo de 2011

Alunizaje alucinante


Todo lo que quería era alejarme, lo mas lejos posible, solo un tiempo, olvidar lo ocurrido y lo nunca sucedido; concederme un tiempo para mi, un tiempo de reflexión, solo hasta que mi felicidad dejase de depender de ella, de ello, de aquello... Envié sin respuesta decenas de solicitudes para ir de misionero a Camerún, Nicaragua, Sierra Leona, tal vez Vietnam, daba igual, pero nada.

Creo que alguna de esas cartas se traspapeló, el caso es que una mañana me despertó el sonido de una interferencia del móvil en la radio (raro, no esperaba ninguna llamada, y tú hacía ya tiempo que no lo hacías), sonó el teléfono, descolgué y una voz de mujer me dijo que me habían seleccionado, que en seis horas salía el avión hacia mi destino y que tenía viente minutos para subirme en el coche que estaba esperándome en la puerta de casa, y sin más colgó. Supongo que la desesperación y la locura se hermanaron en ese momento porque a los 3 minutos ya me había subido a aquel coche sin mas equipaje que mi cartera y mi reproductor de música.

Una vez en el avión por fin una azafata me dijo que me dirigía a Florida. No me pareció a priori mala idea, supongo que cualquier sitio me valía; aunque algo en mi desconfió un instante, no recordaba haber mandado ninguna carta ni nungún e-mail a Florida; pero bueno no parecía un mal destino ¿no?.

Cuando por fin puse pie en tierra en el aeropuerto de Florida, me encontré con un hombre alto, de pelo blanco, gafas oscuras y de corte elegante que sostenía un cartel con mi nombre, me acerqué a él y hechó a andar sin decir una palabra, sin mirarme, sin contestar a ninguna de las cientos de preguntas por segundo que hice hasta que nos subimos a un coche parecido al que me había ido a recoger a casa.

Ya subidos en el coche se quitó las gafas, se aflojó la corbata y como si se tratase de la cosa mas normal del mundo, me explicó que había sido elegido para ser el protagonista de un novedoso experimento de la NASA, un viaje intergaláctico de tres días, no tenía que hacer nada, solo subir y bajar. Ante mi asombro me comentó que la NASA quería explotar el turismo intergaláctico y para ello habían construido una nave de bajo coste y así yo me convertiría en el primer turista intergaláctico de la historia.

Todavía no había sido capaz de asimilar las palabras que aquel hombre me había dicho, y ya estaba en Cabo Cañaveral subido en la nave, con un traje como de papel de aluminio, una especie de escafandra en la cabeza y rodeado de un montón de botones de los que únicamente me dijeron "¡No toques nada!". Antes del despegue uno de los ingenieros me explicó donde tenía comida y agua para sobrevivir los tres días y donde estaba el revolver; mientras pensaba en qué tendría para comer y dudaba de para qué iba yo a necesitar un revolver, llegó el momento del despegue; tres, dos, uno ¡despegue! decía por radio un tal Houston. Dicen que en un momento dado los astronautas a causa de la velocidad viajan una millonésima micra de segundo atrás en el tiempo, yo no se si por ese motivo o por el miedo, no podía dejar de pensar en aquellos momentos que vivimos juntos, en los que parecía que tenernos el uno al otro era todo lo que necesitábamos para ser felices, en los que no mirábamos a las estrellas porque era el cielo quien nos miraba a nosotros dos, aquellos momentos que no puedo olvidar por aquello que me diste.

Entre tanto Houston (un chaval muy majo por cierto) me iba hablando por radio, tranquilizándome contándome un poco cosas que necesitaba saber como por ejemplo cómo se desabrochaba aquel cinturón de seguridad tan extraño, cómo se abrían los cajones de una nave espacial, como se bebía en el espacio...en fin ese tipo de cosas domésticas para las que aquí casi había que hacer un FP.

De pronto, cuando Houston me estaba diciendo que estaba llegando a la exosfera, una especie de turbulencia sacudió la nave, hubo un apagón y nunca mas supe nada de Houston. Al rato volvió la luz y se activó el piloto automático que seleccionó por defecto un nuevo destino, la Luna.

Tras atravesar la atmósfera lunar y tras un alunizaje alucinante en el que el piloto automático hizo gala de su nombre, abrí los ojos y efectivamente estaba en la mismísima Luna. Me zafé como buenamente pude del cinturón de seguridad y comencé a sentir esa sensación de ingravidez, esa sensación de ser una pompa de jabón, esa sensación de besar tus labios. Al abrir el cajón de la comida solamente me encontré cajas de sandías deshidratadas, eran del tamaño de lacasitos, pero amargas, muy amargas, aunque no tanto como tu adiós.

Tras un día refugiado en la nave pensando cuanto echaba de menos tu cama, y después de pensármelo mucho decidí bajar y dar un paseo por la Luna. Es curioso que nada mas bajar de la nave me encontré contigo, evidentemente no estabas allí, pero todo aquello era tan como tú...cada cráter me recordaba cada uno de tus defectos pluscuamperfectos que te hacían tan especial, cada paso que daba era como darte un pequeño beso, la sonrisa de la Luna...deberías verla es tan parecida a la tuya... también mi traje de papel de albal me recordaba el calor de tus abrazos ya que me protegía del intenso frío; era tan extraño y bello escuchar tu voz en el vacío, tus susurros y tu voz en grito desmintiendo las leyes de la física y contándome mil batallitas sin importancia de esas que tanto me gustaban. ¿Sabes? te encantaría esto, aquí si miras al fondo , a lo lejos no ves el horizonte, ves el infinito, ves como crece el universo y como el infinito se reinventa a si mismo, ves como de un infinito sale otro, y de este otro mas, y como se va alejando; creciendo como crece mi amor reinventándose a si mismo a cada instante y alejándose cada vez mas como lo hacen las yemas de nuestros dedos, como lo hicieron nuestros corazones y nuestros labios; pues mis besos cada vez tienen que hacer viajes mas largos en el tiempo para llegar a su destino y nuestras miradas que antes eran capaces de atravesar el alma ahora ni siquiera se cruzan. También te encantaría poder ver desde aquí todos los mares, sacarte una foto en la que sostuvieras la Tierra en tus manos, ver las constelaciones en tres dimensiones...no se si te encantaría o es a mi al que le encantaría tenerte aquí, a mi lado.

Han pasado ya tres semanas desde que me convertí en un lunático, y cada vez me resulta mas evidente el porqué de tener un revolver con una sola bala como compañero de viaje, solo la esperanza de volver a verte, de volver a tenerte entre mis brazos hace que no me resulte tan atractiva la sublime sensualidad que poco a poco voy observando en él; así que escribo esta carta por si no consigo salir de aquí, por si llega el momento en el que el racionamiento de sandías deshidratadas y agua, y el paso del tiempo me hacen ver algo mas en este revolver, en este amigo, en este...


-HAIKU DE LA SEMANA-

Corrientes
Río de vida
el destino ya escrito
yo tu mar hado.


-CANCIÓN DE LA SEMANA-
seguiré inventando, sin parar en los detalles cada día otro motivo pa esperar...









domingo, 27 de febrero de 2011

Pasatiempos


- ¿No eres tú a la que le gusta hacer los crucigramas del periódico todos los domingos?

- Sí

- Pues el amor es eso, un crucigrama…

- No te entiendo

- En un crucigrama hay palabras que todos podemos hacer ¿cierto?, son palabras que los periódicos ponen ahí para que te sientas bien, para que no te des por vencido antes de empezar. Pues cuando conoces a alguien pasa lo mismo, cualquiera puede en un mes saber lo básico de ti: qué música escuchas, cuál es tu película preferida, incluso si cantas o no en la ducha. Pero como en todo crucigrama una vez que pasan las palabras fáciles llegan las difíciles, y en las relaciones pasa lo mismo, lo realmente jodido viene después, cuando te toca conocer la cara b, cuando la gente ya no es tan perfecta como quiso aparentar.

- Entonces ¿tú solo buscas personas que no tengan muchas palabras difíciles?

- Al contrario, adoro la dificultad. He conocido gente que era como un crucigrama para niños pequeños, en un mes se acababa el misterio, y cuando te das cuenta de lo simple que es, te aburre. Me gusta conocer gente que a pesar del tiempo que pase me siga sorprendiendo, que me saque de la monotonía del día a día, gente con quien siempre aprenda cosas nuevas, en definitiva gente de la que sea imposible acabar el crucigrama. Al fin y al cabo, el amor es un pasatiempo, un pasatiempo que nos saca del aburrimiento de la rutina, un pasatiempo diferente eso sí, porque nunca podemos comprobar las respuestas en el periódico del día siguiente.

miércoles, 16 de febrero de 2011

La última vida del último superviviente


Hola, mi nombre es Bear Grylls, he sido entrenado por las fuerzas especiales del ejército británico para ser capaz de sobrevivir en cualquier medio con la única ayuda de los conocimientos adquiridos y los recursos que la naturaleza ofrece. He sobrevivido a las condiciones más extremas poniendo mi vida al límite, he nadado en aguas heladas, he inspeccionado volcanes en erupción, me he bañado con anguilas eléctricas...pero nada comparado con la aventura que voy a contaros hoy, mi última aventura.

Me encontraba en el corazón de La Selva del Amazonas, en la frontera entre Brasil y Perú; ya había pasado tres días y dos noches bajo aquel humedísimo manto verde tras el cual se escondía la inmensidad del cielo. Ya me había conseguido librar del poder superabsorbente de un pozo de arenas movedizas, había sobrevivido al ataque de un puma cuyas heridas curé con la sabia de una planta llamada celosia cristata, me habían picado decenas de mosquitos (que por cierto aquí son como puños) pero gracias a un ungüento hecho con hojas de duguetia riparia las picaduras no habían sido un problema. Había saciado mi hambre gracias a una de las dos pirañas que pesqué en un arroyo con mis propias manos y una tortuga carnívora que andaba husmeando por allí cerca, esta me produjo una importante diarrea que logré subsanar gracias a una infusión que hice con raíz de eleutherine plicata...en fin, un montón de aventuras resumidas en apenas dos días.

Pero nada de lo que me había pasado carecía de una solución fuera de mi alcance, hasta que apareció ella. El chamán de la tribu de los Mayorunas me advirtió en mi anterior visita a estas tierras, de la presencia de aquella especie.

Me encontraba haciendo una pequeña cabaña para poder pasar la noche en un manglar que las intensas lluvias torrenciales de la época habían formado junta al río Xingu; cuando terminé de construir mi humilde pero confortable refugio, me alejé de este tierra adentro con la intención de conseguir unas ramas secas y yesca para con ayuda de mi pedernal hacer fuego para cocinar la piraña que me había guardado, cuando tras unas ramas me encontré con ella, no se porque, pero enseguida supe que era una de esas limiè maten de las que me había hablado el chamán, era consciente del peligro que corría, pero ya era demasiado tarde, su contoneo me había hipnotizado mientras su mirada me había embaucado; supo martirizarme poco a poco, comenzó con inocentes mordisquitos, me amordazó con la sola ayuda de las curvas de su cuerpo, el olor de su cabello inhibía mis ganas de zafarme, pronto supe que la humedad del Amazonas era causada por la cohesión entre el agua de la zona y el calor que ella desprendía; cuando ya me tenía rendido a sus pies, llegó el momento de su ataque mortal, en lo que dura un parpadeo sentí como una especie de daga atrabesaba mi corazón y me robaba el alma, tras esto escuché como se iba y se perdía entre la selva y perdí el conocimiento.

Días después unos cazadores de la tribu Kalapalo me encontraron moribundo en el lugar exacto en el que ella me había sometido, sin rasguño alguno a la vista, pero herido de muerte; siendo esta una muerte lenta y dulce en la que tan pronto el calor de su recuerdo hace subir mi fiebre como se convierte en el frío casi nitrogenado de su abandono.

-HAIKU DE LA SEMANA

-Mariposa-
Te creí mi Sol
metamorfaste en Fa Re
pero te quiero.

-CANCIÓN DE LA SEMANA


lunes, 14 de febrero de 2011

Feliz 14 de Febrero


Nunca me gusto celebrar San Valentín, me parecía una celebración muy impersonal, una mezcla entre consumismo e hipocresía, donde la gente no demuestra su amor, simplemente lo aparenta comprando regalos donde lo único que importa es el precio que marca la etiqueta. Ella era diferente, creía en el amor a primera vista, en el destino, le encantaba San Valentín, incluso adoraba esos estúpidos ositos con corazones que venden en los chinos. Siempre fue mi mayor debilidad, así que yo una vez al año me tragaba mis principios y buscaba como un bobo alguna tontería para conseguir arrancarle una de esas sonrisas que me enganchaban. Pero si has vivido lo suficiente sabrás que todo lo bueno se acaba, y aquello también se acabo. Un día ella se dio cuenta que su vida estaba en Madrid y yo que las grandes ciudades no eran lo mío, nos dijimos adiós, dejando que el tiempo y la distancia hicieran su trabajo.

Lo que vino después, es algo que todavía hoy me gusta recordar, supongo que ese San Valentín los dos estábamos demasiado solos, y la soledad no es algo para lo que todo el mundo está preparado. No recuerdo si fui yo o ella quien llamó, solo recuerdo que una hora después de descolgar el teléfono estaba montado en un autobús de camino a Benavente, una estación a medio camino entre Oviedo y Madrid. Cuando llegué, ella ya estaba allí, esta vez yo no llevaba regalo ni había preparado nada pero ella tenía esa sonrisa, haciendo entrever que mi presencia era el mejor de los regalos. Desgastamos nuestras bocas en conversaciones atrasadas, haciendo de esa cafetería de estación nuestro particular confesionario, después de unos cuantos cafés buscamos un lugar donde pasar la noche, lo encontramos a unos doscientos metros de la estación, era un motel de carretera donde solían pasar la noche los camioneros. Allí recordamos como querernos y agotamos los minutos de esa larga noche. A la mañana siguiente volvimos a poner en nuestra boca un adiós y cada uno cogió su autobús.

Ya no se los años que han pasado desde aquello, los dos nos hemos enamorado y desenamorado varias veces, nos hemos casado e incluso ella ahora tiene dos hijos. Pero desde entonces, una vez al año, el catorce de febrero buscamos cualquier excusa y nos escapamos de la realidad, disfrutamos de la dulce utopía de nuestra compañía en ese motel donde ya casi ni los camioneros paran. Ella dice, que que la clave está precisamente en vernos poco, así no gastamos el amor. Probablemente un año a su lado fuera la mayor de las torturas para alguien como yo, tan desacostumbrado a sus manías o sus cambios de humor, pero al menos durante un día, cada una de las veinticuatro horas que paso junto a ella, para mi es perfecta. Desearme suerte, hoy es catorce de febrero, y de nuevo me toca volver a ver su sonrisa...

domingo, 13 de febrero de 2011

No More Heroes


Era un domingo de esos que no tienen color, de esos que pasan inadvertidos en el recuerdo, un domingo cualquiera. Estaba repasando la sección de contactos del periódico, me gusta hacerlo, nunca he llamado pero de alguna manera un tanto infantil me hace gracia. Justo en la primera pagina de anuncios por palabras había uno que me llamó la atención: "Se busca Superhéroe", pensé que podía ser interesante y como para ser superhéroe, bajo mi punto de vista, no hacen falta súper poderes sino un buen plan de marketing,me puse manos a la obra. Compré en los chinos unos calzoncillos naranja, rescaté un antifaz que tenía por casa de cuando me disfrace de El zorro, me puse unas mallas amarillo fosforito que utilizaba mi madre para correr, y con una camiseta de Terra Mítica con la que me gustaba dormir me presente en la dirección que indicaba el anuncio.

Una vez allí le pregunte a Robín, al que tenía justo sentado en frente, qué de que se trataba el trabajo, me dijo que Red-Bull estaba buscando un Superhéroe con quién identificar su bebida. Me extraño ver a Robin allí, hacía años que él y Batman se había retirado, ahora dirigían una asociación para ayudar a salir del armario a Superhéroes, ya había conseguido que Ironman y el Hombre Antorcha hicieran público su amor. De entre todos, al que más desgastado se veía era a Superman, desde que Loisse le había dejado por un multimillonario ruso se había abandonado, ahora su criptonita era el alcohol y con lo único que era capaz de luchar era con las ganas de beber. Con algo menos de pelo, algo más de barriga y unos músculos que envidiaban cualquier tiempo pasado, también estaban: Flash, El capitán América o el mismísimo Hulk. El único que faltaba era Spiderman, lo cierto es que había sido el único que le había ido bien, al parecer un Jeque se había empeñado en que lo único que le faltaba a Abu dhabi para ser mejor que Nueva York era él, y ahora le pagaba una pasta por saltar de edificio en edificio entreteniendo a los turistas.

Al final no me dieron el trabajo, me dijeron que no daba el perfil, que estaban buscando un Superhéroe con más gancho. Pero bueno, no fue todo tan malo, me quede con la experiencia y el número de teléfono de Catwoman, ahora me toca intentar comprobar si es cierto lo que dicen de ella en la cama…

martes, 8 de febrero de 2011

Rojo,negro, blackjack


"Rojo, negro, blackjack" era lo único que nuestros ingenuos oídos querían escuchar. Era la combinación mejor pagada y menos probable de aquel lujoso casino de Las Vegas. Todas nuestras esperanzas puestas en un rojo en la ruleta 6, un negro en la ruleta 7 y blackjack para el crupier de la mesa 5; tan solo eran tres favores que pedíamos que nos concediese el azar para ser los dos hombres con la vida mas feliz del mundo,para poder vivir de la mejor forma posible con nuestras mujeres a las que habíamos logrado reconquistar y a las cuales amábamos con locura y sin miramientos, ¡lo juro!

Había llegado el momento, se cerraron las apuestas, nos lo habíamos jugado todo a una carta, todos nuestros ahorros resumidos en un puñado de fichas de colores en una jugada tal vez demasiado avariciosa, para la cual nuestra locura tuvo que esforzarse a fondo para que así nos dejásemos llevar. Dicen que la avaricia rompe el saco, pero en este caso el azar nos guardaba un as bajo su manga y escuchamos nuestra tan ansiada frase, "rojo, negro, blackjack" ; antes de que el director del casino, Mr. Morway terminase la frase, ya se habían oído descorchar las primeras botellas de champán francés, una tormenta de confeti dorado inundó aquella gran sala y todo a nuestro alrededor comenzó a ir muy rápido.
Y hasta aquí lo que recuerdo de aquel día, de ahí en adelante lo hemos reconstruido como una maqueta compuesta de pequeños flashes recogidos por nuestras retinas y por las consecuencias que nos encontramos cuando nuestro entorno volvió a ir a nuestra misma velocidad. Toda una noche de excesos, el alcohol embriagó rápidamente mi virginal hígado y no tardó en ahogar al de mi compadre, recuerdo vagamente gente entrando con bolsas de kilo de un polvo blanco que después nos servían en bandejas de plata como si de canapés se tratase, no tengo una imagen de mi mano separada de algún elemento humeante, de sabores y consecuencias mas o menos fuertes, dispuesto a ser devorado por mis pulmones...

Lo peor llegó cuando recuperé la consciencia, abrí los ojos y descubrí la fatalidad, estaba en la suite real del Hotel Luxor, desnudo y acompañado por una muchacha que no superaba la veintena también desnuda y con un certificado matrimonial entre las piernas en el que constaba que estábamos legalmente casados, en la mesita había una foto de la dantesca boda ambientada en la película Grease, mi sorpresa fue aún mayor cuando al pasar al salón contiguo me encontré a mi compañero en idéntica circunstancia; fue en ese momento en el que comprendí que la avaricia una vez mas había roto el saco, porque a pesar de que nuestras cuentas corrientes se vieron inundadas de un cero tras otro a la derecha de otro mas, habíamos renunciado a todos y cada uno de nuestros valores, esos mismos valores en los que siempre creímos y de los que con sufrimiento y con el transcurrir de mucho tiempo habían empezado a emanar los primeros frutos.
La vuelta a casa parecía un funeral, el cual terminó con nuestras vidas en pareja lapidadas a pesar de llevar nuestro arrepentimiento gravado a flor de piel.

Con el tiempo decidimos abrir nuestro propio negocio, un taller de maquetas en el que somos dos artesanos que buscan siete motivos a la semana por los que seguir viviendo y en el que construimos pequeñas maquetas de cómo habríamos querido que fuesen nuestras vidas, de las cuales a pesar de los millones de nuestras cuentas corrientes, ya no somos propietarios. Algunos días hacemos maquetas sobre cosas que podríamos hacer para recuperar en una tercera oportunidad, aunque fuese siendo ya viejecitos y arrugados, aquello que era lo que mas queríamos y que perdimos inconscientemente por culpa de aquella maldita frase "rojo, negro, blackjack".

Hoy te he visto pasar por delante del escaparate del taller, no has titubeado ni un momento, ni tan siquiera has mirado de reojo; aún así te he llamado a este tu número oculto, y no he sabido que decir.




-HAIKU DE LA SEMANA-

Eclipse:
Cambiante luna
de cara clara u oculta
¿cuál es la tuya?


-CANCIÓN DE LA SEMANA-
Pienso que es la canción cantada con mas sinceridad de la historia. No creo que jamás me olvide de ella y su dulzura desbordante , y creo que de ti tampoco
(NO DEJEN DE VER EL VÍDEO)




sábado, 5 de febrero de 2011

El último James Dean



Ahí estaba, apoyado en aquella barra huérfana de taburetes, dándole los últimos sorbos a un whisky con sabor a agua que le habían cobrado a precio de oro, buscando con la mirada alguien a quien amar por una noche. Nunca se había complicado demasiado a la hora de vestir: camiseta blanca, pantalones vaqueros, unas botas desgastadas y una cazadora de cuero negra completaban su fondo de armario. Su única obsesión era su pelo, en sus bolsillos nunca faltaba un peine pequeño, y cualquier espejo era una buena ocasión para darle uso.

La búsqueda pronto dio resultado, y cerca de unas escaleras que conducían a la sala vip la vio, destacaba entre las demás por su pelo rojizo y su tez blanca, llevaba un vestido ceñido que dejaba muy poco a la imaginación y lucia una de esas sonrisas que te hacen imaginar demasiado. Después de unos minutos, el cruce de miradas se convirtió en una mirada sin cruces, entonces poso el vaso, sacó un cigarro y se fue acercando lentamente a ella mientras lo encendía, sin dejar de mirarla, sin dejar que pudiera perderse en los ojos de nadie más. Las palabras precedieron a las risas, y justo cuando comenzaban las caricias un tipo alto, engominado, con una camisa rosa abierta que mostraba un pecho totalmente depilado y tostado por el sol ademas de unos músculos rebosantes de esteroides, empezó a hablar con ella. En un abrir y cerrar de ojos, con tan solo cuatro palabras y la ayuda de una bolsita de polvo blanco, ella se marchaba, se olvidaba de las caricias y las risas mientras se perdía entre la gente de la mano de aquel armario con cabeza.

Salió del local minutos mas tarde invitado por los porteros, al parecer ya no estaba permitido fumar en los bares. Su moto estaba en el depósito por conducir sin casco, así que encendió otro cigarro, y se puso en camino de la parada de taxis más cercana, mientras disfrutaba del sabor de aquella deliciosa mezcla de: nicotina, tabaco y alquitrán; murmurando entre dientes My Way” de Frank Sinatra, sonriendo amargamente, y tratando de recordar si aquella pelirroja le había dicho su nombre.

And now, the end is near
And so I face the final curtain
My friend, I'll say it clear
I'll state my case of which I'm certain
I've lived a life that's full
I traveled each and ev'ry highway
And more, much more than this,
I did it my way...

martes, 1 de febrero de 2011

Made in China:晨光


Y por fin estaba aterrizando en Shanghái, después de un viaje que parecía iba a ser eterno allí estaba en el país del sol naciente; un lugar en el que todo es inmenso, en el que para salir de la terminal echas en falta una bicicleta, en el que los callejeros se venden por fascículos y en el que tanto las grafías, símbolos o como quiera que se denomine, así como el idioma me eran completamente desconocidos.

Llevaba ya un buen rato intentando recuperar mi maleta, preguntando con la ayuda de un pequeño diccionario chino-español , español-chino; pero no había manera, no se si sería porque el diccionario era de los baratos o por mi escasa capacidad de manejarme con los vocablos orientales. Fue entonces cuando me vino a la cabeza una de esas ideas de ingenio loco que me caracterizan y comencé a hacerme pasar por mudo para que así la gente estuviese atenta a mis gestos y no se perdiese en el laberinto de mi verborrea mandarina. De ese modo conocí a aquella chiquita, que con el tiempo descubriría que se llamaba Chénguang, ella tenía la solución a todos y cada uno de mis problemas, recuperó mi maleta, me sacó de aquel monstruoso aeropuerto, me consiguió un taxi y amablemente me llevó a un humilde hostal a las afueras de la ciudad en el que me quedé hospedado; lo mas curioso de todo esto fue que en todo este proceso, no intercambiamos ni una palabra, es mas, ella no habló ni tan siquiera para indicarle al taxista a dónde debía ir y lejos de convertirse en una situación tensa o embarazosa fue de lo mas agradable.

El día siguiente lo dediqué a patearme los barrios aledaños a la zona donde se encontraba mi hostal , aquí casualmente todos los barrios son chinos, todos los restaurantes eran de comida china y todos los calendarios tenían los días cambiados. Caminando caminando llegué a una zona industrial, dominada por grandes, enormes fábricas; pero justo allí en medio de la cuna de las manufacturas y olimpo de las exportaciones mundiales me tropecé con un pequeño taller, un taller como el de cualquier artesano, pero aquel tenía algo que ningún otro taller ni ninguna gran fábrica del mundo podía ofrecer, y era su producto, pues este era un taller de amor y Chénguang era la artesana de aquel taller. Rápidamente me mostró el proceso productivo, aquí el amor se soldaba con calurosos besos de pasión, se recubría de una fina capa de cosquilleantes caricias, se pulía con suspiros profundos, se envolvía con cientos de abrazos sinceros y se enviaba con penetrantes miradas directas al alma, y todo ello sin decir una sola palabra.

Hoy viendo los primeros rayos de luz del día recostado sobre la gran muralla china junto a Chénguang, he comprendido que como a ella hay personas para las que ser mudas no les resultaría un impedimento ya que te hablan con el corazón y que tener los ojos achinados implica que aprendas a ver con el alma pues ella ha hecho que mis ojos se estén achinando por momentos.