sábado, 29 de enero de 2011

Sábado


Y el dialogo murió en un beso, mientras se prometían lo imposible. Palabras perennes, y billetes de ida sin vuelta, lluvia en sus ojos y un ligero sabor a desastre. La vuelta atrás mientras lo infinito se convierte en efímero y la realidad se abria paso entre el engaño de dulces narcóticos. Circunstancias distantes entre personalidades divergentes. Heroínas sin maya, príncipes rojos adictos al opio, clientes de la mala vida y lo ajeno. Mientras, el último baile se baila sin sombrero, ebrios, pero sin sombrero, dejando que los etcéteras rellenen los espacios en blanco de esta perfecta ironía. No hay palabras, ideas, ni brebajes, hoy no hay misterio, cambios, ni adjetivos, solo lluvia tras los cristales y frio, mucho frio.

miércoles, 26 de enero de 2011

Rincones de mi Hollywood natal.


Todo el mundo vive condicionado por La Mano Que Mece La Cuna de esta meca del cine que es la vida. Vida en la que te toca meterte en infinidad de papeles , tan pronto La Vida Es Bella y empiezas cada día tomándote un Desayuno Con Diamantes en el Casablanca; como te golpea un Armageddom tras el cual 2012 se queda corta y La Pasión De Cristo resulta ser tan solo una mala tragicomedia americana.

Báilame El Agua me sugeriste en un fotograma digno de La Dama y El Vagabundo, yo hice caso de tus palabras cual Billy Elliot realizando mi particular Flashdance , improvisando como El Pianista, luchando como El Último Samurái en Troya contra Casi 300, tratando de descifrar junto a Indiana Jones tu Código Da Vinci. Todo para tratar de lograr lo que finalmente ha sido la Misión Imposible, Como Agua Para Chocolate, de abrir El Arca Perdida de tu corazón.

Éramos Dos Tontos Muy Tontos, protagonistas de la posible historia jamás escrita entre Pretty Woman y El Guardaespaldas, pero en Hollywood lo nunca escrito nunca existe; y tras 9 Semanas y Media, justo cuando estábamos a punto de llegar a El Mundo Perdido que siempre había soñado, realizaste El Truco Final y desapareciste. Desapareciste, y de golpe el mundo volvió como en un Déjà Vu a ser igual que el Sáhara, triste, seco y alicaído; un lugar en el que a El Hombre De La Máscara De Hierro se le ve apenado, donde Alí Babá y Los 40 Ladrones se van juntos de copas pagando cada consumición en el acto y en el que Lucky Luke ha tenido ya varios problemas de gatillazo.

No es extraño que me encuentre como un Náufrago desterrado en La Isla, con la única compañía del Señor Supertele, donde nuestro único lazo de unión es La Jungla De Cristal que es La Red Social y donde trato de escribir el guión en el que consiga coger La Ola adecuada para salir de aquí y convertirme en tripulante del Titanic para virar todo a estribor y ser capaz de cambiar el rumbo de La Historia Interminable.

Tú en Hollywood caminando por el paseo de las estrellas, te sientes Tres Metros Sobre El Cielo porque ves pasar estas a tus pies, pero ten cuidado, Aterriza Como Puedas, no vaya a ser que tú también te lleves El Gran Golpe, entonces quizás añores Lo Que El Viento Se Llevó y quieras coger un billete de Retorno Al Pasado donde El Mañana Nunca Muere, quizás entonces pueda brindarte un pequeño charquito de estrellas de La Tormenta Perfecta que será/fue nuestro amor.


sábado, 22 de enero de 2011

Cualquier día puede ser un lunes.



A veces me quedo solo, tan solo acompañado por mis principios hablando del producto de esta vida que llevo. Entre tintes de irrealidad y un cierto olor afgano debatimos sobre esto y aquello, mientras embriagamos nuestros cuerpos para despejar nuestras mentes.

Entonces, cuando mi cuerpo ya no es mi cuerpo, me quedo solo, acompañado pero solo, me sumerjo en los laberintos de ideas que se forman en mi cabeza, lánguido, vacio, al filo del precipicio y con la mirada perdida pienso en este ahora limitado por los vicios y lleno de resquicios de un pasado demasiado presente. A veces pienso demasiado y me consumo, me consumo entre expectativas y aburrimiento de un guión sin argumento, me ahogo entre consecuencias y deseos, entre recuerdos e ibuprofenos. Otras veces me automedico con paciencia, combativa contra el odio voraz que plaga mi cuerpo, pero no siempre tengo suficiente y veo como este consigue derribarme, convirtiéndome en algo que odio, y metiéndome otra vez en ese círculo vicioso.

Y en esos segundos que se convierten en minutos, en esos minutos que se convierten en horas, trato de encontrarme. Lucho dentro de mí, contra ese impostor que se hace pasar por mí, siendo en verdad mi mayor enemigo. Recopilo cada paso dado, y solo me pido, cambiar el formato, cambiar el rumbo, descubrir mis preferencias y perseguirlas lejos de las falsas apariencias, lejos de mis estúpidas creencias en palabras que hace tiempo ya, que perdieron su significado.

Cuando mi mente se atasca en un punto de no retorno, rescato mis pensamientos con un sorbo de un whisky mal destilado, y vuelvo a esta realidad irreal, mientras dejo que el alcohol haga su efecto.

Sonando: Damien Rice - The Blower's Daughter

martes, 18 de enero de 2011

Inspiración: un cuadro llamado Amor




Recuerdo cada detalle de aquel día perfectamente, me levanté en mi humilde habitación alquilada por horas en la Rue Visconti a 2 Francos la hora, no desayuné aquel día (desde entonces no he vuelto a hacerlo)salí corriendo porque me quedaba un largo camino hasta la plaza de los pintores y si quieres coger un buen sitio tienes que llegar bien temprano.

Crucé como un rayo cada avenida, cada calle, cada parque montado en mi paupérrima bicicleta, pasé por delante de la majestuosa Torre Eiffel, crucé los Campos Elíseos, casi arrollo a un jorobado en los aledaños de Notre Dame, crucé el Sena por el Port d'Arcole, un par de giros a la izquierda , un par de giros a la derecha y por fin llegue a la plaza.

Lo primero que hice nada mas llegar fue recostar la bicicleta y mis enseres junto una columna y me acerque a hacer cola en la mas pequeña, pero a su vez mas transitada fuente de París con mi pastilla de jabón para asearme y acicalarme un poco antes de que la gente empezase a llegar. Cuando terminé cogí mis trastos y me pregunté cual sería el lugar adecuado, fue entonces cuando vi caer del cielo una pluma de un ave que no fui capaz de identificar,caía suavemente , como sin ganas de llegar al suelo, como si no le importase como a mi me importaba en que lugar de la plaza caer, y tal fue así que se cayó en un rincón que nadie en su sano juicio elegiría, pero ella lo hizo y yo no se aún el motivo ni la razón decidí ponerme allí, pensé que esa pluma había sido una señal y que ese debía ser el lugar en el que debía colocarme aquel 15 de Agosto.

Mientras desplegaba mi trípode plegable, mezclaba mis pinturas y colocaba en orden ascendente mis pinceles, algunos compañeros se mofaban de mi por haber llegado tan temprano y haberme quedado con aquel sitio; y no les faltaba razón , estuve allí cerca de 4 horas, y nadie se había parado a ver ninguno de mis cuadros, ninguna niña le pidió a su padre que le hiciera una caricatura...nada, parecía un día perdido.

Tras 8 horas allí y cuando ya empezaba a recoger mis bártulos, tras un lienzo y como si de alguna manera me buscase apareció aquella muchacha con esa mirada que parecía contar mil historias tras el silencio, con esa sonrisa que deslumbraría al mismo sol, con esos andares tan simpáticos, de apariencia torpe pero de paso firme; tal vez dos o tres años mas joven que yo, de una clase social acomodada pero con apariencia de haber vivido experiencias de infinitos rangos. Vestía un blusón azul-verdoso con un cinturón ancho negro a la altura de la cintura, zapatos a juego y en el pecho un broche adornado con una pluma igual a la que me había hecho elegir aquel rincón.
Se dirigió a mi tratándome de tú mientras yo necesité tratarle de usted, me pidió un retrato, pero que quería un retrato especial, quería ver el retrato y sentirse una princesa pero que no pareciese uno de esos retratos de nobles tan vacíos en los que aparece el noble de turno sobre un fondo negro, ella quería un mundo de flores, de cosas bonitas y felices. Siendo sinceros antes de que su voz, por cierto de gran cuerpo y llena de personalidad, terminase de narrarme lo que quería yo ya había empezado a dibujar.

Nunca me consideré un pintor mejor que ninguno otro, de hecho la confianza en mi mismo en ocasiones decaía, pero aquel día las líneas convergían en sueños plasmados en mi lienzo, los colores primos se cohesionaban de tal forma que las tonalidades se hermanaban unas con otras, todo fluía mientras ella no paraba de contarme anécdotas variopintas, del último libro que había leído, e infinidad de cosas interesantes de las cuales aquella noche anoté muchas de ellas en mi libreta de las ideas.
Al cabo de media hora quizás tres cuartos , me di cuenta de que estaba pintando con los ojos cerrados, de pronto los abrí y me encontré firmando un cuadro majestuoso, extraordinario, fuera de lo común, y a años luz de mi nivel. Fue entonces cuando ella me preguntó si ya había terminado, yo le respondí que si y le enseñé mi obra; se quedó asombrada, sin palabras; pero me dejó helado cuando dijo "es muy bonito, pero no es un retrato, no es lo que estaba buscando así que me voy , no lo quiero". Y se fue, se perdió entre la gente sin que pudiera decirle nada, sin poder decirle que daba igual, que le regalaba el cuadro, sin poder preguntarle su nombre, sin poder despedirme.

Cuatro días después unos señores en representación del excelentísimo Museo del Louvre parisino se personaron en mi rincón, aquel que la pluma había señalado, y ofrecieron 100 millones de Francos por el cuadro, traté de explicarles que ese cuadro era un regalo que ya tenía dueña mientras ellos se echaban las manos a la cabeza y se tiraban de los pelos preguntándose en voz alta como alguien podía ser tan tonto de rechazar esa oferta y de dejar escapar la oportunidad de ser el pintor mas laureado y famoso de la historia.

Es el día de hoy, tras haber cambiado dos veces de década, incluso tras haber cambiado de milenio, que desde entonces sigo levantándome cada día como aquel 15 de Agosto en la misma habitación de la Rue Visconti, sigo haciendo el mismo trayecto en mi eterna bicicleta, y sigo poniéndome en aquel rincón que eligió la pluma, que por cierto junto con un par de monedas lo único que llevo en mi cartera, con la única esperanza de que algún día aquella muchacha pase por allí y pueda regalarle su cuadro.

sábado, 15 de enero de 2011

¿Libertad?



- Déjame en paz, quiero ser libre. ¡Quiero libertad!

- ¿Libertad? ¿Qué sabes tú de la libertad? Yo te diré algo acerca de la libertad, ¡No existe! Es una mentira, una invención para que pienses que puedes elegir, que decides lo que eres y lo que serás, pero en realidad otros deciden por ti, en realidad tus decisiones solo son el resultado de influencias y expectativas. Desde que naces tus padres, los profesores, y la religión se encargarán de decirte como debes sentarte, a que debes tener miedo, o como debe de ser tú primer beso, se encargarán de limitarte diciéndote lo que puedes y lo que no puedes hacer. Te llenaran la cabeza de expectativas sobre tu futuro, haciendo que tu vida, que tu tiempo gire en torno a cosas que probablemente no te importan, pero a las que dedicaras tu vida porque para ellos es la única manera de ser “feliz”. La televisión y la sociedad se encargarán del resto cuando crezcas, metiendo en la ecuación la fiebre por el dinero y las altas expectativas sobre el amor, haciendo que pierdas el culo trabajando por una familia a la que ni siquiera verás, y casado con alguien a quién nunca quisiste. Porque eso es lo que se supone que debes tener, ya sabes: la nomina con muchos ceros, el coche con muchos caballos y la mujer con muchas tetas.

- Entonces ¿Nunca podremos ser libres?

-Solo cuando las expectativas las pongamos nosotros, y estás tampoco nos limiten. Cuando termines el día y no tengas la sensación de haber vivido la vida de otro, cuando no llenes tu vida de sonrisas tratando de agradar, cuando consigas preguntarte si cada cosa que haces la haces porque realmente se te apetece o solo te limitas a cumplir los deseos de alguien que no eres tú, cuando tú elijas a tus amigos y no los elijan las circunstancias. Solo entonces, empezarás a sentir ligeramente la libertad y empezarás a ser realmente como TÚ quieres ser.

martes, 11 de enero de 2011

Il gondoliere


Que bonitos paseos en góndola en el atardecer de nuestra querida Venecia, en la que todo exhala amor, en la que el violinista que mora junto al canal toca la melodía más bella jamás improvisada y en la que todo baila al ritmo del son que marca el vaivén del flotar de aquella góndola.

Pero para, detente un instante; congela por un momento esa imagen y mira, y fíjate, fíjate en el gondolero , uniformado , siempre tan recto , tan perfecto , tan correcto...siempre dispuesto a remar por un amor, que pese a no ser el suyo, le merece todo su empeño.
Y es que todo gondolero, al igual que este humilde narrador. es un fracasado en el amor , un tocado y hundido en cuestión del corazón; pero que pese a todo ello sigue creyendo en que hay miradas que acarician y susurros que te abrigan, pues la única premisa de presencia obligada en el curriculum de todo gondolero , es creer en este sentimiento.
Si las palabras de aquel sabio entre los sabios eran ciertas "es el amor lo que hace moverse al orbe"; el gondolero forma parte de ese engranaje perfecto que hace que todo en este mundo siga su curso.

¿Que qué quiero ser de mayor? de mayor quiero ser gondolero pues gracias a mi trabajo generoso el mundo seguirá su senda.
Pero ten claro niña, que el día que montes en mi góndola remaré , remaré y remaré hasta caer exhausto pero para entonces habré conseguido salir de este laberinto de canales que separa a todo gondolero del triunfo en el amor.

Ya puedes darle al play, descongelar la imagen y disfrutar de lo bonitos que son los paseos en góndola cuando son contigo Amor.


sábado, 8 de enero de 2011

Rebajas



Lo reconozco, desde hace algún tiempo me paseo por tu vida. Inmóvil, callado, me gusta detenerme delante de tu escaparate y contemplar una de tus miradas, uno de esos gestos tuyos que tan especial te hacen. Nunca compro nada, busco y rebusco en el fondo de mi bolsillo tratando quizás de encontrar algo de valentía y confianza, pero lo único que me encuentro es un agujero por el que se van todas mis esperanzas. A pesar de todo, me encanta perderme en la sección de besos para volverme a encontrar en la de abrazos, hacer cola en los probadores para ver que tal me sienta una conversación contigo, o incluso dejarme llevar hasta el pasillo siete, romper una de tus alarmas y sin que lo notes robarte una sonrisa.

Al final conseguí coser ese agujero, al final conseguí llenarme de confianza. Así que hoy vine directo a tu vida, sin paradas por el camino ni rodeos, sin dudas ni vacilaciones, pero me encontré que estabas de rebajas. Decenas de desconocidos abarrotaban tus estanterías y probadores, llevándose tus besos de sábado con sabor a ginebra y tus noches de sexo con desconocidos, pero olvidándose de lo más importante ¿Por qué te cuento todo esto? Porque quiero que sepas todo lo que he recorrido antes de llegar al punto al que ahora me encuentro, estancado delante de ti, tembloroso y a punto de hacer la compra más importante de mi vida; porque no quiero comprar un beso, un abrazo, o una noche de sexo contigo, quiero el paquete completo, te quiero a ti, y te quiero en todas tus tallas, diseños y colores. Así que hazme la factura y cóbrame el precio original, porque no estoy dispuesto a pagar ni un céntimo menos de lo que vales, y te puedo asegurar que vales mucho.

martes, 4 de enero de 2011

Pacto de muerte

Me gustaría perder por un instante los cinco sentidos , escuchar el estruendo del silencio , descubrir de que color se viste la nada , disfrutar del sabor y el olor de lo insípido e inodoro sin que sepa a agua , y patentar el rozar del alma.

Me gustaría que en ese mismo instante mi corazón dejara de latir y notar como parte de mi sangre se queda enfrascada entre aurícula y ventrículo , y como el resto se queda estancada por las venas , arterias y capilares , repartida uniformemente por mi cuerpo.

Me gustaría también que en ese instante se borrasen de mi mente todos sus recuerdos , los malos porque los odias e hicieron y hacen daño , y los buenos porque los adoras lo que provoca que te hagan mas daño aún al saber que no volverán ; y será cuando a partir de entonces volveré a disfrutar de cada una de esas pequeñas cosas que guarda el universo , como alguna vez hicimos todos.

En definitiva , me gustaría morir un instante y pactar con la muerte y su atractivo , que en lugar de quitarme la vida y darme descanso eterno , me quite esos instantes en los que necesitas volver a vivir y así dejar de ser para haber sido y en un instante volver a ser.